Arqueta sifónica: qué es, tipos, instalación y limpieza para evitar malos olores

Fecha: 2019-11-08 08:02:27

Autor: Netjet

 

La arqueta sifónica es uno de los elementos más importantes en las redes de saneamiento domésticas y comunitarias. Sin embargo, muchas veces pasa desapercibida hasta que aparecen problemas como malos olores, atascos o filtraciones. Conocer qué es, cómo funciona, dónde se instala y qué mantenimiento requiere puede ahorrarte muchos quebraderos de cabeza. 

En esta guía completa, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la arqueta sifónica, sus tipos, funciones, ventajas y la importancia de su limpieza periódica. 

¿Qué es una arqueta sifónica?

Una arqueta sifónica es un depósito subterráneo que forma parte de las redes de saneamiento. Su función principal es recibir, enlazar y distribuir canalizaciones de aguas residuales, al mismo tiempo que bloquea el paso de olores y gases procedentes del alcantarillado gracias a un sistema de sifón. 

A diferencia de otras arquetas, la sifónica actúa como un filtro contra malos olores, evitando que estos asciendan a través de las tuberías hasta el interior de viviendas o locales. 

Tipos de arquetas

En el mundo del saneamiento existen diferentes tipos de arquetas, cada una con un uso específico: 

  • Arqueta de paso: solo conecta dos o más tuberías. 

  • Arqueta sifónica: bloquea olores y gases. 

  • Arqueta separadora de grasas: retiene grasas y aceites, muy usada en cocinas industriales. 

  • Arqueta a pie de bajante: recoge aguas pluviales o residuales de los edificios. 

  • Arqueta sumidero: recoge aguas de escorrentía superficial. 

  • Arqueta de reunión: une varias canalizaciones antes de derivarlas al colector principal. 

Dentro de esta clasificación, la arqueta sifónica es fundamental en viviendas unifamiliares, comunidades y negocios, ya que garantiza salubridad y confort. 

¿Cuándo instalar una arqueta sifónica?

La instalación de una arqueta sifónica es recomendable (y en muchos casos obligatoria) en los siguientes casos: 

  • Final de la red de saneamiento en viviendas unifamiliares: antes de conectarse al alcantarillado público.
  • Edificaciones antiguas sin sifonaje individual: cuando los aparatos sanitarios no tienen sifón o este no funciona correctamente. 
  • Sistemas de recogida de aguas pluviales: especialmente en patios, jardines o terrazas para evitar olores del alcantarillado. 
  • Sustitución de un bote sifónico tradicional: una arqueta sifónica es más accesible y de mayor capacidad. 
  • Reformas o modificaciones de desagües: cuando se pierde el sellado original de los sifones individuales.

 Funcionamiento de una arqueta sifónica

¿Cómo funciona un sifón? 

El sifón es un sistema hidráulico que retiene agua en su interior para impedir el paso del aire, permitiendo únicamente la circulación de líquidos. Gracias a esta retención, los olores del alcantarillado no pueden subir por las tuberías. 

En las viviendas, casi todos los sanitarios (lavabos, duchas, fregaderos) tienen un sifón. La arqueta sifónica cumple exactamente la misma función, pero a mayor escala, protegiendo toda la red privada de desagües de una casa o edificio. 

El papel de la arqueta sifónica en la red de saneamiento 

  • Actúa como barrera contra los olores del alcantarillado. 

  • Recoge aguas grises y negras de diferentes tuberías. 

  • Permite la distribución correcta del agua hacia el colector general. 

  • Ayuda a prevenir atascos si recibe un mantenimiento adecuado. 

Ventajas de instalar una arqueta sifónica 

Instalar una arqueta sifónica aporta múltiples beneficios: 

  • Higiene y salubridad: evita que los gases del alcantarillado entren en tu vivienda. 

  • Comodidad: adiós a los malos olores en baños, patios o cocinas. 

  • Acceso al sistema: facilita revisiones y limpiezas de la red. 

  • Versatilidad: puede colocarse en viviendas, comunidades, jardines o instalaciones industriales. 

  • Prevención de problemas mayores: al ser registrable, permite detectar fugas o atascos a tiempo. 

Materiales y modelos de arquetas sifónicas 

Las arquetas sifónicas pueden fabricarse en diferentes materiales: 

  • Hormigón: muy resistente, ideal para exteriores y cargas pesadas. 

  • PVC: más ligero y fácil de instalar, común en viviendas. 

  • Poliéster reforzado: duradero y resistente a la corrosión. 

En cuanto a su diseño, todas incluyen: 

  • Entrada y salida de tuberías. 

  • Cámara de agua para el efecto sifón. 

  • Tapa registrable (en la mayoría de los modelos). 

Mantenimiento y limpieza de arquetas sifónicas 

Las arquetas sifónicas requieren un mantenimiento periódico para garantizar su buen funcionamiento. 

Problemas comunes 

  • Acumulación de grasas, jabones o restos orgánicos. 

  • Atascos por toallitas o residuos sólidos. 

  • Olores desagradables por pérdida de estanqueidad. 

  • Colapsos de la red al no evacuar correctamente el agua. 

Limpieza profesional 

La mejor forma de mantener una arqueta sifónica es con limpiezas periódicas a presión mediante camión cuba. Este sistema: 

  • Elimina restos orgánicos y sólidos. 

  • Limpia paredes y fondo de la arqueta. 

  • Previene atascos y fugas. 

  • Asegura la estanqueidad del sistema. 

Se recomienda una revisión al menos una vez al año en viviendas, y con mayor frecuencia en locales de hostelería o comunidades de vecinos. 

La arqueta sifónica es una pieza clave en cualquier sistema de saneamiento. Su papel como barrera contra malos olores y su función de distribución de aguas residuales la convierten en un elemento imprescindible en viviendas, comunidades y negocios. 

Un mantenimiento regular asegura que funcione correctamente, evitando atascos y problemas de salubridad. Si sospechas que tienes una arqueta sifónica obstruida o desconoces su ubicación, lo mejor es contactar con profesionales en desatascos y saneamiento. 

Si necesitas una revisión de las arquetas en tu vivienda o no consigues ubicar la posición de estas, ponte en contacto con nosotros.

 

Preguntas frecuentes sobre arquetas sifónicas 

¿Qué diferencia hay entre una arqueta normal y una arqueta sifónica? 

La arqueta normal solo sirve como punto de conexión o registro de tuberías, mientras que la arqueta sifónica incluye un sifón que evita la salida de malos olores. 

¿Dónde se coloca la arqueta sifónica en una casa? 

Normalmente en el último punto de la red privada de saneamiento, antes de conectarse al alcantarillado público. 

¿Qué pasa si una arqueta sifónica no funciona bien? 

Pueden aparecer olores desagradables, atascos o fugas, comprometiendo la salubridad de la vivienda. 

¿Cada cuánto tiempo hay que limpiar una arqueta sifónica? 

Se recomienda una limpieza anual en viviendas y trimestral en negocios de hostelería o comunidades grandes. 

¿Puedo instalar yo mismo una arqueta sifónica? 

Es posible, pero se recomienda contar con un profesional para asegurar la correcta pendiente, sellado y estanqueidad. 

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